Marta García

Nombre Apellido: Marta García

Pais: España

Ciudad: Zaragoza

Nacionalidad: Española

Formación: Grado Superior de Formación Profesional y Master en Marketing y Comunicación Corporativa

Sector: Servicios

Puesto: Administradora, diseñadora y creativa


Nací el 26 de diciembre de 1977, siempre fui una niña inquieta y apasionada por el mundo de las artes escénicas y la música. Hija única pero con unos padres que supieron educarme y enseñarme a valerme por mí misma; educación que no se aprende en ninguna escuela y de la cual estoy y estaré eternamente agradecida.

Mi aspiración era ser una gran periodista… pero cuestiones familiares (soy hija única y no pude irme a estudiar fuera de Zaragoza), y otras casualidades de la vida (mi padre es profesor) terminé por realizar un módulo de Especialista en Equipos Informáticos una vez aprobada la selectividad. Allí conocí a quien a día de hoy es mi mejor compañero y amigo, además de ser mi marido. Posteriormente decidí seguir formándome y estudiar un Grado Superior de Aplicaciones Informáticas, además de estar en el 6º curso de la carrera de piano y de ser montañera (afición que me viene de mi padre), aunque en aquella época mis fuerzas ya flaqueaban… Al mismo tiempo, empecé en el mundo laboral haciendo trabajos de cajera los fines de semana en el Alcampo de Utebo. Creo que ahí empecé a ser consciente de que el trato con la gente me hacía feliz. Es una época de mi vida que, a día de hoy, recuerdo con mucho cariño; me emociona ver como hay excompañeras, que siguen trabajando en ese supermercado, que se acuerdan de mí y me saludan cuando paso por su caja.

Los años iban pasando, terminé los estudios y me puse a trabajar… tareas administrativas en una subcontrata de Ibercaja, un despacho de ingenieros y arquitectos, una gestoría…. Estos trabajos me hicieron aprender y sobre todo, crecer como persona. Fue en esta época cuando decidí independizarme. Necesitaba comprobar y demostrar que podía hacerlo, que me valía por mí misma, y por esa razón alternaba, mi trabajo de día con mi trabajo de cantante los fines de semana. Fue una etapa dura, muy dura, de la que tengo pequeños recuerdos malos pero, que a la vez, está llena de gente maravillosa que me ayudó y con la que compartí grandes momentos encima de un escenario.

En el 2002, después de muchas visitas al médico, operaciones, corsé... y de tildar mi falta de fuerza como vagancia, mi familia y yo descubrimos que tenía una enfermedad rara y consiguieron diagnosticarme de Miopatía de Central Core. Con síntomas como debilidad muscular, no poder subir fácilmente escaleras, múltiples caídas, un 66% de discapacidad y un baremo de 8 de movilidad reducida. Según los últimos análisis genéticos, resulta que mi variación de gen es nueva... y, como dicen el Dr. Oliveros y la Dra. Larrode, soy una 'mutante' ya que soy la primera persona en tener esta variación y tal vez consiga que le pongan mi nombre.

Circumstances of life led me to stay out of work in a radical way. I decided that I did not want to lose everything Circunstancias de la vida me llevaron a quedarme sin trabajo de manera radical; decidí que no quería perder todo lo que había conseguido, por lo que ni me apunté al paro y empecé a buscar trabajo de inmediato. Después de un mes conseguí el trabajo que más me ha hecho crecer y aprender y, del cual estaré eternamente orgullosa y agradecida, sobre todo porque me dieron una gran oportunidad y vieron en mi cualidades que ni siquiera yo sabía que existían. Javier Guiu, mi mentor, me enseñó a trabajar en equipo, a ser responsable y a crecer como persona. En el 2012 quise volar y poner en práctica en mi propia empresa todo lo que él me había enseñado… espero no haberle defraudado

Para poder llegar a donde estoy hoy, en primer lugar he tenido que superar, la inseguridad por no tener un sueldo fijo y que al principio era un tipo de empresa estacional, teníamos temporadas altas y otras muy bajas.

A nivel económico tuvimos al principio el apoyo de familia pero sí que es verdad que al ser autónomos no se tienen muchas facilidades bancarias a no ser que tuviéramos avalistas.

Somos especialistas en diseño así que en el tema de la gestión de la empresa nos ha costado encontrar un gestor que realmente nos ayudara y nos solucionara nuestras dudas.

Creo que lo que más me ha ayudado es mi carácter extrovertido y que, por lo que me dicen transmito tranquilidad, y eso ayuda a la hora de poder realizar cualquier tipo de trabajo con nosotros.

También todas las relaciones profesionales que hice en mis trabajos anteriores me han abierto muchas puertas a la hora de trabajar.

Mi carácter y mis ganas de trabajar en equipo han hecho que haya creado una red de colaboradores fuerte y profesional con los que además, nos divertimos trabajando y creo que al final, eso es lo mejor de todo.

A la hora de definir mis competencias, soy una persona con facilidad para aprender y para aplicar los nuevos conocimientos a mi trabajo, me adapto rápidamente a los cambios, coordino y motivo a las personas que trabajan conmigo además de poner atención a los problemas que puedan tener. Necesito tener objetivos en el trabajo, me gusta trabajar en equipo y cuando es necesario soy capaz de tomar decisiones rápidamente.

De entre las cualidades que poseo me considero una persona habladora, persistente, optimista e innovadora. Confío en las personas, soy ambiciosa a la hora de marcarme objetivos, tengo visión de futuro y soy una persona organizada, además de por supuesto ser muy creativa!

Pese a ser hija única, no me ha gustado que me den las cosas hechas y mi impulso ha sido siempre superarme a mí misma.

Los“culpables”del inicio de esta aventura fueron unos amigos nuestros que tienen una empresa de catering en Valencia. Cuando nosotros teníamos vacaciones nos íbamos allí a verlos y como siempre estaban trabajando, al final nos“picó el gusanillo”; a mí sobretodo me encantaba todo lo que rodeaba al mundo evento, ver feliz a la gente y disfrutar con algo que habían creado ellos.

Los consejos que yo daría a otras mujeres con discapacidad que quieren empezar un negocio es que nada es imposible; teniendo una buena base de estudios y mucha fuerza de voluntad, todo es posible. Sobre todo, que les guste y les apasione lo que vayan a emprender, sea un negocio o un nuevo camino profesional. Realmente no veo que haya diferencia con otras mujeres que no tengan discapacidad, simplemente hay que sacar provecho de las capacidades que cada uno tiene.

Respecto al emprendimiento inclusivo creo que queda pendiente por desarrollar una base de subvenciones y ayudas específicas dependiendo del tipo de actividad y del tipo de discapacidad.